Blog de Javier Merchán. Ríete tú de las fake news de Donald Trump. Me invento todos los contenidos, pero no espero que nadie se los crea.
Escribo sobre cosas importantes sin tomármelas en serio.
¿Habéis recibido alguna vez un mensaje de WhatsApp de alguien que no conocéis? ¿Nunca? Un chico me había conocido en una discoteca y quería volver a verme. Le había dicho que me llamaba Susan. Y ahí le tenías, buscando a Susan desesperadamente. Estuve a punto de llamarle y quedar. Pero resulta que nos habíamos visto en un garito de Houston. Claro, ahí teníamos un problema. Típico de Houston. El caso es que, como ya sabéis, yo no me llamo Susan y nunca he estado allí (eso no lo sabíais). Así que tuve que declinar la oferta. En otra ocasión me escribieron para comprarme un reloj. Que yo al mío le tengo mucho cariño, pero es que me ofrecían 10.000 francos suizos. Lástima que no tengo ningún Rolex a la venta. Otros me escriben para cambiarme de compañía. Con lo que me gusta a mí la compañía que tengo. Que no les cambio por nada del mundo. Buena gente, amigos de sus amigos y siempre están ahí. O aquí. Según el momento. Ya me entendéis. Pero esta semana, me pasó una cosa notable. He
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Black Friday, Jalogüin… ¿Cuándo celebraremos Acción de Gracias?
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En muchos posts tengo que empezar explicando el título. Aquí no creo que
haga demasiada falta. Ya sabéis por dónde voy. ¿No nos estaremos pasando con
tanta modernidad y globalización y nos estamos volviendo más americanos que una
señora de Güisconsin (donde quiera que esté. Que no, no es el señor que dice
bromas en la tele, ese es de otro estado)?
El caso es que poco a poco estamos copiando, ojo, en el todo el mundo,
lo que hacen los señores de los E. E. U. U. Y no es ni bueno, ni malo. Es así.
Y yo venía a hablaros de los pros y los contras que tendría que al final nos
nacionalicemos todos americanos. Yo os presento los datos y vosotros luego ya veis
que queréis hacer. Allá vamos.
Historia
¿Os imagináis que en vez de tener que estudiar toda la historia de
España, llena de Reyes, Austrias, Borbones (todos quieren ser los campeones),
Godos y todos los demás, os tuvierais que aprender los Presidentes? La historia
es muy cortita. En el principio había indios, se los cargaron, ganaron los
vaqueros y llegó Trump y ahora quiere que se vayan los que no nacieron allí….
Bueno, no todos, sólo algunos, los que a él no le gustan.
Lo malo es que nos olvidaríamos de nuestra historia… aunque eso ya está
pasando… Nos apañaríamos con una peli de 2 horas, como Forrest Gump, que te
explica toda la historia de Estados Unidos en dos patadas, y a todo correr. ¿Y
sería Rey Donald Trump? ¿Donald King? (¡Qué lío de hamburguesas!) Donald I de
España y luego de Estados Unidos… ¿O cómo sería el título?
Fucking idioma
¡Ameisin! Por fin hablaremos inglés. Porque mira que nos cuesta. Toda la
vida aprendiendo el “uanchufri” y los colores, y hasta ahí. Y no tendremos que
aprendernos la primera persona del pluscuamperfecto del verbo del subjuntivo.
Presente, pasado y futuro, y poco más. ¡Que eso es de tantos tiempos verbales!
Y que haremos con todos los insultos en castellano. Que ellos dicen muy
pocos tacos. Pocos tacos pero muy repetidos. ¿Qué pasa cuando te des un golpe? Porque el fuck vale para todo, pero no te
alivia lo mismo que un “hostiaputajodé”, así todo junto. Y ahora puedes insultar
en gallego, catalán, o euskera. Eso nos lo van a quitar. Siempre podremos
insultar en la intimidad.
Pavo… o pavo
No más dolores de cabeza pensando la cena de Nochevieja… Pavo, y de
segundo, pavo relleno, y en Navidad, lo mismo, pero con arándanos. Será muy
cómodo y crecerá el sector pavero. ¿Cordero o besugo? ¡Pavo! Y ya está
¿Qué pasa con los que no les guste el pavo o sean “verdívoros”? Pues la
gente que coma verde se comerá el relleno, los arándanos y el puré de patata. A
ver si vamos a tener que cambiar el menú porque a los señoritos no les guste
comer pavo. Habrá que sacrificarse… como hizo el pobre bicho, ¿O vosotros
creéis que a él le hace gracia que nos lo zampemos?
¿Barça, Real
Madrid? Aquí se juega al fútbol de verdad
Se acabó el fútbol. Y eso no tengo claro si ponerlo en la parte buena o
la mala. No más programas en los que hablan si Messi se ha tatuado la cara de
Cristiano Ronaldo o si CR se ha teñido la barba pelirroja. Eso sí, habrá más
variedad, baloncesto, rugby con hombreras, señores en pijama jugando con un
palo o béisbol, hockey.
Habrá que adaptar un poco los deportes a España. No veo muy factible lo
de poner campos de hockey sobre hielo en Sevilla. Igual podrían subir un poco
el aire acondicionado en el Corte Inglés para que la gente entrene. Y que nos
vayan explicando las reglas del béisbol, o del rugby… Ya lo estoy viendo,
equipos y nombres nuevos, Los Madrid Merengators frente a los Culetors de
Barcelona. Bilbao Lions versus Indians Atleticos. Y todos podrán tocar el balón
con la mano, y con el pie, y agarrarse… todos menos tirar del pelo, que está
muy feo, y además llevan casco. Aunque tendremos que acostumbrarnos a jugar con
un balón diferente.
Las fiestas
Ya no habrá fiestas de guardar. O sí, pero se llamarán de otra manera. President Day, Martin Luther Day, Christmas Day, son poco originales
para estas cosas allí. No tienen el Virgin of The Pillar Day, The Ascension of
the Virgin, o The Saint Week (lo que
viene siendo la semana santa). Unos ateos rojos es lo que son. Quizá me he calentado un poco, rojos, lo
que se dice rojos, no son… Y ateos, tampoco, lo que pasa es que tienen otras creencias, muchas, y algunas muy raras.
Como os iba diciendo, allí no son todos católicos apostólicos y romanos.
Hay evangélicos, mormones (también quieren ser los campeones), protestantes,
presbiterianos (que son los que no ven bien de cerca… ¿o eso es adventista?).
El caso es que allí tienen un lío de mil demonios… Quizá no está bien mezclar
los demonios con la religión… ¿o sí?
Soy ciudadano
norteamericano, pago mis impuestos.
Siempre quise decir esta frase. Es lo que dicen en las películas para
protestar de cualquier cosa. Que no quieres terminarte el cola-cao (por cierto,
se acabará el Cola- Cao), lo dices. Que quieres cargarte a un señor de Iowa
porque se ha colado en tu jardín, también lo dices. Ahora lo podremos decir
todos.
Lo malo, es que algunos que no pagan impuestos, tendrán que hacerlo… A mí me han defraudado algunos jugadores de fútbol... bueno en realidad, nos han defraudado a todos... Que
no es que todos los americanos paguen, los que tienen mucha pasta
tampoco les hace mucha gracia pagar. Eso no va a cambiar.
Ahora ya vosotros decidís, que todavía podéis. Luego no vengáis que yo
no sabía, que si no me habían explicado. No hagáis como los americanos que
votaron sin pensar… o los británicos que ahora se arrepienten por lo del Brexit….
O como noso…. Mejor no sigo, que ya tenéis bastantes ejemplos. Bye, bye… digo….
¡Hasta la próxima semana!
A veces, cuando me pongo a pensar sobre qué escribir en el blog, se me ocurren muchas cosas. Luego me doy cuenta de que alguien ya ha escrito sobre ello, y el cabrón o cabrona lo ha hecho mejor. Otras veces tengo una idea y cuando llevo un buen rato escribiendo, me digo “pero si de esto ya he hecho un post”. Y otras veces, directamente no pienso. Esta vez voy a escribir sobre cosas que ya se han escrito. Pero vamos a hacerlo de otra manera. Y os explico por qué. Pues “resultadeque” estaba leyendo una crítica de una película y no terminé de entender si me estaban recomendando verla, si era muy mala, o me comprara un Opel Corsa. No comprendí nada. Yo creo que los críticos de cine, como escriben a oscuras en la sala de cine, pues luego no entienden lo que han puesto y tienen que inventar, y de ahí lo de “la levedad inescrutable del personaje tiene connotaciones que nos recuerdan el sufrimiento crónico de la sociedad en un ambiente que recela de todo…” Y ahí estás tú l
Esta semana no me voy a meter con las cosas religiosas, a pesar del título (y de que a veces te ponen las cosas a huevo). Aunque los que pintan algo en la iglesia (no me refiero a la señora que hizo el garabato en Borja), se metan en las cosas de los demás, no lo voy a hacer yo. No hagas a los demás que te hagan como yo quiero al prójimo… (Creo que es algo parecido, pero es que ese día me cambié a Ética y me perdí la clase de “Reli”). Esta semana os quería hablar sobre los nombres. Pero no el nombre del padre o del hijo (de verdad que hay nombres de hijos que son para matar al padre y para que le dé un ataque al Espíritu Santo. No tenéis más que pensar en algún Kevin Costner de Jesús, “Yosuas” y Samantas). Hablaremos de los nombres comunes. Hay padres hijos de… Porque vamos a ver ¿Quién pone el nombre de las cosas? A los animales, a las flores, a las ciudades… ¿Dónde está el responsable? ¿Con quién hay que hablar para que se ponga orden? ¿Y qué es este sindiós de
¿Habéis recibido alguna vez un mensaje de WhatsApp de alguien que no conocéis? ¿Nunca? Un chico me había conocido en una discoteca y quería volver a verme. Le había dicho que me llamaba Susan. Y ahí le tenías, buscando a Susan desesperadamente. Estuve a punto de llamarle y quedar. Pero resulta que nos habíamos visto en un garito de Houston. Claro, ahí teníamos un problema. Típico de Houston. El caso es que, como ya sabéis, yo no me llamo Susan y nunca he estado allí (eso no lo sabíais). Así que tuve que declinar la oferta. En otra ocasión me escribieron para comprarme un reloj. Que yo al mío le tengo mucho cariño, pero es que me ofrecían 10.000 francos suizos. Lástima que no tengo ningún Rolex a la venta. Otros me escriben para cambiarme de compañía. Con lo que me gusta a mí la compañía que tengo. Que no les cambio por nada del mundo. Buena gente, amigos de sus amigos y siempre están ahí. O aquí. Según el momento. Ya me entendéis. Pero esta semana, me pasó una cosa notable. He
Efectivamente. Yo creo que aunque en general nos estemos intentando modernizar, hacemos bastante el indio, a nivel mundial.
ResponderEliminarLo siento, pero yo no quiero esa España aunque con la que tú me has pintado me he reído hasta estar descojonado.
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