Blog de Javier Merchán. Ríete tú de las fake news de Donald Trump. Me invento todos los contenidos, pero no espero que nadie se los crea.
Escribo sobre cosas importantes sin tomármelas en serio.
¿Habéis recibido alguna vez un mensaje de WhatsApp de alguien que no conocéis? ¿Nunca? Un chico me había conocido en una discoteca y quería volver a verme. Le había dicho que me llamaba Susan. Y ahí le tenías, buscando a Susan desesperadamente. Estuve a punto de llamarle y quedar. Pero resulta que nos habíamos visto en un garito de Houston. Claro, ahí teníamos un problema. Típico de Houston. El caso es que, como ya sabéis, yo no me llamo Susan y nunca he estado allí (eso no lo sabíais). Así que tuve que declinar la oferta. En otra ocasión me escribieron para comprarme un reloj. Que yo al mío le tengo mucho cariño, pero es que me ofrecían 10.000 francos suizos. Lástima que no tengo ningún Rolex a la venta. Otros me escriben para cambiarme de compañía. Con lo que me gusta a mí la compañía que tengo. Que no les cambio por nada del mundo. Buena gente, amigos de sus amigos y siempre están ahí. O aquí. Según el momento. Ya me entendéis. Pero esta semana, me pasó una cosa notable. He
Obtener enlace
Facebook
X
Pinterest
Correo electrónico
Otras aplicaciones
¿Cómo saber que un español es español y muy español?
Obtener enlace
Facebook
X
Pinterest
Correo electrónico
Otras aplicaciones
-
España está llena de españoles. Es lo que tiene. Y ahora en agosto también
está llena de alemanes, y de ingleses, pero a esos se les distingue fácilmente.
Son los que tienen un color especial, como Sevilla, pero en rojo pasión.
También hay mucho italiano (italianas no, o se camuflan entre nosotros) y
franceses, y marroquíes, y cubanos, y de otros muchos, muchos sitios.
Hace poco leía que el señor ese que en la cabeza no tiene más que pelo y no
estoy seguro de que sea suyo, también conocido como Donald Trump, que había que
hacer tests para medir el nivel de “americanidad” y el que no tiene pase no
pasa.
En España ya hay un test parecido, y te preguntan el nombre del rey de
España (ahí ya estaríamos jodidos por que se nos ocurriría Juan Carlos primero
y Felipe después) o el nombre del padre y del hijo y del espíritu Santo, y el
del Presidente del Gobierno (lo bueno es que si te quedas en blanco, aciertas.
No sabemos cuándo tendremos presidente), o decir quién escribió El Lazarillo
(tampoco acertaríamos)…. El caso es que a mí se me ocurre hacerlo de otra
manera.
¿Qué es eso de un examen tipo test cuando hay maneras más fiables? Te pongo unos ejemplos de las pruebas que
podríamos hacer para saber si alguien es español o no.
Canciones
No vamos a probar si se sabe una sevillana o el himno, eso sería muy fácil.
La prueba sería con una batería de canciones y ver las reacciones del
analizado. Si le dices Macarena y en menos de 1 segundo no responde con un “¡Aaaaaaaay!”,
o si canturreas Mercadona, y no sigue con el mercado-o-na, o le cantas lo de El
Chiringuito, y no lo repite… o empiezas los primeros acordes de Paquito el
Chocolatero y no te sigue con el típico ¡Hey! olvídalo, no es español, o es el
tío más triste del mundo… o son el ejército chino.
Productos españoles fuera de temporada
Enséñale una tableta de turrón en agosto, o un roscón de Reyes en abril, un
cocido en pleno julio, una sandía en febrero…. Si no da muestra de extrañeza,
es más guiri que los americanos que corren en los sanfermines. Un español te
diría que no, que eso no lo prueba. Que el turrón se come cuando hay que
comerlo, que las sandías son para el verano, como las bicicletas, que los
únicos cocidos en julio son los ingleses en Mallorca, y que en abril aguas mil.
Las muñecas de Famosa vuelven
a casa del negrito del África Tropical
Esta frase, que por cierto, ahora que la veo parece el título de una
película porno, para un español muy español tiene significado. Son algunos de
los anuncios más famosos de la historia. Si al escuchar lo de las muñecas de
Famosa no te sale inmediatamente que se dirigen al portal, o lo de Vuelve a
casa por Navidad o la canción de Aquel Negrito del África Tropical… ¿Por
cierto, ¿Qué habrá sido del negrito que cultivando cantaba la canción del Cola
Cao? ¿Y dónde está eso del África Tropical? No os perdáis el final del vídeo.
¡Que rima!
Un buen español moja
Vamos a entendernos. No es que me quiera poner machito y diga que mojamos
más que los extranjeros. Lo que digo es que un español como Dios manda no se
resiste a mojar el churro…. O una madalena (los muffins también se mojan) o el
pan en el aceite, o en el salmorejo. Que
ves a un inglés mordisqueando una galletita que es un como un ladrillo con el té
y no lo mojan ni nada. Si fuera español veríamos como la metía, y sin
pensárselo.
Pon a varias personas en un buffet de desayuno de un hotel. Si ves a uno
que repite, y repite, y vuelve a repetir como Froilán de todos los Santos en el
instituto, es español. Esa necesidad de tener que comerte todo lo que te ponen
en la mesa (y en la de al lado). Y es que nos han dicho desde pequeños que hay
que comérselo todo, y siempre hemos sido muy obedientes (con lo que queremos).
Huevos fritos, duros, tostadas, beicon, chorizo, queso, madalenas, tostadas,
zumo de naranja, de limón, de tomate, un par de cafés, y un trozo de pan por si
te quedas con hambre.
Organiza una cola y si….
Me refiero a una fila, para ordenar a la gente… Prueba en varios países y
si se forman 3 filas, cada una para una dirección, con algunos que se hacen el
orejas y se intentan colar, puede ser en Italia, España, Francia (se
caracterizan por ponerse todos en el medio no dejando pasar a nadie), pero si
alguno dice. ¡Eh, no te cueles! Y el otro responde, si no me cuelo, me estaba
guardando el sitio aquí mi primo… Es una cola española (no vamos a hablar de
tamaños, que nos conocemos).
El pelotón
Si hay más de 2 montando en bici, hay una necesidad imperiosa de que al
menos uno de ellos empiece a silbar la bonita melodía de Verano Azul. Incluso
en el Tour de Francia lo hacen… sólo los españoles, porque los guiris no han
tenido la suerte de ver la serie…. (nosotros que tenemos mucha suerte, nos la
repiten todos los años). Lo dicho, si escuchas esta música, es que hay
españoles. Y si ya, se sueltan de manos, es que son muy españoles… Sólo los
chicos, que las chicas no tienen el gen de hacer el bobo en la bici.
Por favor, para ir a…
Otra prueba y ésta es casi definitiva. Si alguien pregunta, pongamos en
inglés, francés o ruso, cómo ir a algún sitio, un español le responderá a
gritos, hablando despacio y acercándose mucho al “preguntaor”. Y además, se extrañará de que el otro no le
entienda. Con lo clarito que le está respondiendo. TOOOODOOO REECCCTO, Y LAAAA
SEGUUUUNDAAA AAAA LAAA IZQUIEEEEERDAAA. ¿OOOOOKEEEEEY?
Cualquier parte del mundo, 11
de la noche
Hay que aclarar, cualquier parte del mundo, menos España. Para saber quién
es español, será el que se cabree porque el restaurante esté cerrado a las 11
de la noche. “Pues vaya m·$&U$%· de
país que todo está cerrado tan pronto”. Y es que lo de cenar a las 7 de la
tarde o comer a las 12 un sándwich no está hecho para nosotros…. Realmente no
está hecho para nadie, pero los guiris se acostumbran a cosas muy raras.
¿10 euros por un chorrito de “ginebra”?
Hablando de acostumbrarse a cosas raras, un español no se acostumbrará
nunca a que le cobren 5 euros por una cerveza, o pedir un cubata y que te
pongan 3 centilitros como si fuera una medicina o algo. Y es que en España les
tienes que decir a los camareros que paren y no te pongan más ron, o whisky. Y
en el extranjero de fuera un whisky doble es como un chupito nuestro…
Si no sabes porque un famoso es famoso, estás en el lugar
correcto
En casi todas partes un famoso lo es porque ha hecho algo en la vida.
Escribe libros sin faltas de ortografía, o hace películas, o es deportista…En España hay famosos que no sabes porque lo
son…. Y ahí empiezan a escribir libros o hacer películas, pero ya eran famosos
antes. ¿Qué saben hacer? Nada o el doble. Nada de nada. Puede que te digan que
es que han participado en Gran hermano VIP o están en la tele y por eso son
famosos. Pero cómo han llegado a Gran Hermano o a la tele, no lo sabe nadie. ¿O
alguien sabe cuál es el talento de Belén Esteban? ¿O de Isabel Preysler? ¿O de
los hermanos Matamoros? (no sabemos si han matado a alguno, pero asustarles,
seguro que les asustan).
Decibelios en la tele
Otra prueba para medir la españolidad es medir el nivel de los gritos de la
gente que sale en la tele. A mayor “decibelidad” (no confundir con imbecilidad…
o sí, lo podéis confundir porque también hay bastante de esto) más
posibilidades de que el sujeto, o la sujeta sean españoles. Nos gusta hablar
alto, muy alto, y a todos a la vez, al mismo tiempo. No sólo en la tele, en la
radio, en los aeropuertos. Y es que hay veces, que no queda más remedio…
Medalla de oro en la
modalidad de discusión por cualquier cosa
Que no digo yo que los extranjeros no discutan, que seguro que sí, pero nosotros
más. Y mejor. Y más tiempo. Podemos discutir sobre cualquier cosa, con cebolla
o sin cebolla, fútbol o baloncesto, mar o montaña, carne o pescado, y subimos el
volumen, y hablamos a la vez. Estos niños se nota que no son españoles, gritan,
y discuten, pero guardan el turno.
Como ves hay suficientes maneras de probar que alguien es español. No hace
falta cumplir con todas las pruebas, pero si dudas, también le puedes decir que
tu madre hace la mejor tortilla de patatas, si le has tocado la fibra, es que
es español. O si le dices que las mejores empanadillas son las de Móstoles, o
que es un fistro pecador. Otra manera de saberlo es si alguien 5 minutos
después de decir que un equipo de fútbol es el peor
porque va perdiendo, al remontar, te dice que es el mejor del mundo. Si arregla
las cosas en dos “patás”, si te dice que esas cosas (siendo esas cosas,
cualquier cosa) sólo pasan en España. Si confunde a Doña Rogelia y los muñecos de
Mari Carmen (y sus muñecos) con los de Jose Luis Moreno. Si le dices que no hay
huevos a hacer algo y lo hace. Si va a comprar la barra de pan en chándal. Si
se cae su amigo y antes de preguntarle si está bien, se muere de risa. Si se
pone a hablar por el móvil y automáticamente se pone a caminar y anda el
equivalente a dos maratones, un triatlón y el camino de Santiago ida y vuelta….
Y ya la prueba definitiva, si hay algo gratis y todo el mundo lo coge porque es
gratis, ya sabes dónde estás.
Alguno diréis que esas cosas pasan en
cualquier sitio… y probablemente tendréis razón. Pero hay cosas que sólo pasan
en España. O no :-).
A veces, cuando me pongo a pensar sobre qué escribir en el blog, se me ocurren muchas cosas. Luego me doy cuenta de que alguien ya ha escrito sobre ello, y el cabrón o cabrona lo ha hecho mejor. Otras veces tengo una idea y cuando llevo un buen rato escribiendo, me digo “pero si de esto ya he hecho un post”. Y otras veces, directamente no pienso. Esta vez voy a escribir sobre cosas que ya se han escrito. Pero vamos a hacerlo de otra manera. Y os explico por qué. Pues “resultadeque” estaba leyendo una crítica de una película y no terminé de entender si me estaban recomendando verla, si era muy mala, o me comprara un Opel Corsa. No comprendí nada. Yo creo que los críticos de cine, como escriben a oscuras en la sala de cine, pues luego no entienden lo que han puesto y tienen que inventar, y de ahí lo de “la levedad inescrutable del personaje tiene connotaciones que nos recuerdan el sufrimiento crónico de la sociedad en un ambiente que recela de todo…” Y ahí estás tú l
Esta semana no me voy a meter con las cosas religiosas, a pesar del título (y de que a veces te ponen las cosas a huevo). Aunque los que pintan algo en la iglesia (no me refiero a la señora que hizo el garabato en Borja), se metan en las cosas de los demás, no lo voy a hacer yo. No hagas a los demás que te hagan como yo quiero al prójimo… (Creo que es algo parecido, pero es que ese día me cambié a Ética y me perdí la clase de “Reli”). Esta semana os quería hablar sobre los nombres. Pero no el nombre del padre o del hijo (de verdad que hay nombres de hijos que son para matar al padre y para que le dé un ataque al Espíritu Santo. No tenéis más que pensar en algún Kevin Costner de Jesús, “Yosuas” y Samantas). Hablaremos de los nombres comunes. Hay padres hijos de… Porque vamos a ver ¿Quién pone el nombre de las cosas? A los animales, a las flores, a las ciudades… ¿Dónde está el responsable? ¿Con quién hay que hablar para que se ponga orden? ¿Y qué es este sindiós de
¿Habéis recibido alguna vez un mensaje de WhatsApp de alguien que no conocéis? ¿Nunca? Un chico me había conocido en una discoteca y quería volver a verme. Le había dicho que me llamaba Susan. Y ahí le tenías, buscando a Susan desesperadamente. Estuve a punto de llamarle y quedar. Pero resulta que nos habíamos visto en un garito de Houston. Claro, ahí teníamos un problema. Típico de Houston. El caso es que, como ya sabéis, yo no me llamo Susan y nunca he estado allí (eso no lo sabíais). Así que tuve que declinar la oferta. En otra ocasión me escribieron para comprarme un reloj. Que yo al mío le tengo mucho cariño, pero es que me ofrecían 10.000 francos suizos. Lástima que no tengo ningún Rolex a la venta. Otros me escriben para cambiarme de compañía. Con lo que me gusta a mí la compañía que tengo. Que no les cambio por nada del mundo. Buena gente, amigos de sus amigos y siempre están ahí. O aquí. Según el momento. Ya me entendéis. Pero esta semana, me pasó una cosa notable. He
Yo conozco a un español auténtico: Puede presumir de que su madre hace la mejor tortilla de patatas.
ResponderEliminar