Blog de Javier Merchán. Ríete tú de las fake news de Donald Trump. Me invento todos los contenidos, pero no espero que nadie se los crea.
Escribo sobre cosas importantes sin tomármelas en serio.
¿Habéis recibido alguna vez un mensaje de WhatsApp de alguien que no conocéis? ¿Nunca? Un chico me había conocido en una discoteca y quería volver a verme. Le había dicho que me llamaba Susan. Y ahí le tenías, buscando a Susan desesperadamente. Estuve a punto de llamarle y quedar. Pero resulta que nos habíamos visto en un garito de Houston. Claro, ahí teníamos un problema. Típico de Houston. El caso es que, como ya sabéis, yo no me llamo Susan y nunca he estado allí (eso no lo sabíais). Así que tuve que declinar la oferta. En otra ocasión me escribieron para comprarme un reloj. Que yo al mío le tengo mucho cariño, pero es que me ofrecían 10.000 francos suizos. Lástima que no tengo ningún Rolex a la venta. Otros me escriben para cambiarme de compañía. Con lo que me gusta a mí la compañía que tengo. Que no les cambio por nada del mundo. Buena gente, amigos de sus amigos y siempre están ahí. O aquí. Según el momento. Ya me entendéis. Pero esta semana, me pasó una cosa notable. He
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Oscar, Goya y otros señores que dan premios a los peliculeros
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Oscar, Goya y otros señores que dan
premios a los peliculeros
El otro día estuve viendo (ya, ya sé que
esta es la típica forma de empezar un monólogo, pero es que así fue) la gala de
los Goya y me detuví (¿O se dice detenguí?)
a pensar. No me pasa muchas veces. Lo de detenerme sí, me refiero a lo de
pensar. Y pensé que todas estas galas, los Goya, Oscars y todos estos señores
que se dedican a dar premios, son muy similares, por no decir parecidas (o como
se diga).
Sale una señora, o un señor, a presentar la gala. Y
canta, y baila, y cuenta chistes, y sonríe, y habla con el público y se mete
con las autoridades competentes y otra vez a sonreír. Y volver a presentar a
gente que entrega los premios al mejor guion, a la mejor actriz, la mejor
iluminación, y la música más original, a
la música menos original y así hasta que eligen la mejor película. Todo ello
votado por los señores de una Academia. Y cada vez es una academia distinta. Y
son academias que no conoce nadie, ni siquiera son de CCC, ni una academia de
inglés, o de baile, ni de mecanografía ni nada. Y así pasa, que eligen cosas
que…
Mejor te lo cuento con ejemplos. Cosas que pasan en los
premios de cine.
La alfombra roja
Básicamente es, como su propio nombre indica, una
alfombra colorada, muy larga, por la que pasan los señores que van a la gala y todo
el mundo habla antes, durante y después sobre los vestidos y los trajes. Me
explico. Por ejemplo. Penélope Cruz va vestida de Carolina Herrera. Podría ir
de Tortuga Ninja, pero no, ha decidido disfrazarse de otra persona. Y van todas
muy guapas y guapos. O casi todos. A veces, hay gente que se peina chupando un
pararrayos. He aquí la muestra.
El photocall
¡Aquí! ¡Aquí! ¡Aquí! 2 millones de fotógrafos diciendo lo
mismo para que los actores, directores y señores nominados, famosos y famosas
miren al pajarito. Y posen, y pongan morritos y se pongan de perfil y den
vueltas para salir guapos y lucir palmito (siempre me he preguntado dónde
llevan el palmito). A la de la foto se le va a salir el palmito (donde quiera
que esté).
¿Y éste quién
es?
En la alfombra roja y/o en el photocall el famoso sale
con sus seres queridos y a veces con su familia. Y a veces ni sabes a quién
estás viendo. Puede que sea este actor que se llama… Sí hombre, este que sale
en la película de uno que está vivo y luego se muere… Que también salió en la
serie esa que tiene tantos capítulos…. Y
a veces es sólo el director de la película y no le conoce nadie. O la mujer del
diseñador de interiores de la película ganadora del festival de cortos de
Albacete (seguimos hablando de películas).
Al Presentador/a que presenta hay que
criticarle siempre
Da igual que lo haga mal, regulín, bien o muy bien,
siempre hay que decir algo en su contra. ¡Qué mal canta! ¡Qué mal baila! La
broma no era muy buena… Un señor o señora que se tira 20 horas (la duración
media de estas galas) soltando bromas, sonriendo, bailando, cantando, presentando
a gente le deberíamos dejar pasar algunas cosas ¿no? Aunque no salgan con el
vestuario adecuado.
Minutos
musicales
No sólo canta el señor o señora presentadora. A veces
llevan cantantes, cantantas y grupos que cantan canciones musicales. Y algunos
cantan bien, y otros mal, y otros simplemente dan el cante.
Vamos a homeja… homanej…. a recordar
Y nos ponen un vídeo con gente que nos ha dejado. Me voy
a explicar no sea que penséis que ponen imágenes de la novia que ya sólo nos
quiere como amigo, o un video del “Yonatan” que se ha pirado con la Jessi. Me
refiero a gente relacionada con el cine que ha muerto recientemente. Y aquí los
asistentes a la gala son muy crueles, sólo aplauden a los famosos. O a lo mejor
están contentos de que ya no estén con nosotros. ¿Quién sabe? Los famosos son
tan extraños…
El mejor vestuario es para…
Que aquí esperas que digan: El vestuario del Barcelona, o del
Manchester City que tiene jacuzzi y sauna, y piscina de bolas. Pues no, es un
premio que dan a la película por la ropa que llevan. Y no te creas que premian
al que va bien vestido, con la ropa planchada y la raya como dios manda y bien
limpita… En las películas porno seguro que premian al menor vestuario. Y aquí
tenéis un ejemplo de película que ha conseguido el Oscar al mejor vestuario, y
mirad que pintas llevan. Pero es que no debe ser fácil vestir a un conejo.
Maquillaje, jeje
También dan un
premio a la película en la que van con las pestañas más rizadas y los labios
pintados. A la mejor peluquería no, pero yo le daría el premio a la unos amigos
míos que cortan muy bien el pelo. Echo de menos también premio a la perfumería
y droguería… Mejor a la droguería no la metemos e estas cosas.
Mejor Dirección de fotografía
Si estáis esperando a que os diga qué diantres (¿qué
diantres significara diantres?) significa este premio, vais listos. Ni idea, pero yo me imagino a un señor
diciéndole a los actores dónde ponerse todo el rato para salir bien guapos y
que no se pongan unos delante de otros, y salgan peinados y bien vestidos. O puede ser el que le recuerde
al cámara que no haga la película en vertical, que luego se ve muy mal en
algunas pantallas.
Guion original,
adaptado, mixto con patatas y refresco grande
A los señores que escriben las películas no les dan
demasiada bola, pero por lo menos los guiones tienen varios premios,
dependiendo si es un guion original (no se lo han copiado a nadie) o adaptado
(que le han hecho un corta, pega, colorea) y lo ponen en una hoja por una cara
y con lo de Interior Noche, secuencia primera, quinto piso, escalera B. Os dejo un ejemplo de guion…
Actor, actriz,
principal, secundario, de reparto, novel, pelirrojo, bajito…
De estos premios también hay categorías. No todos los
actores que salen en la peli se les mide igual. Depende si son chicos o chicas,
sin salen mucho tiempo en la peli, si salen poco, si es su primera película. Un
jaleo, vamos. Que un señor en su primera película y sólo actúa 10 minutos puede
ganar el premio al Mejor Actor Secundario novel de reparto Barajas - Adolfo
Suárez… Ya me he “liao”.
Se lo dedico a
mi familia que me estará escuchando
Todos los premiados tienen un tiempo para agradecer a los
miembros (los de la Academia) y dedicarle el Oscar o el Goya, o lo que quiera
que hayan ganado a sus familias, sus parejas, a sus padres, a la Virgen del
Perpetuo Socorro o su PM (prima Maripuri). Pero algunos se lían…
Dirige la
orquesta…
Los señores que dirigen la película también se llevan un
premio. El Premio al mejor director. Curioso ¿verdad? Y es que decide cómo son
los planos y los movimientos de cámara, y le dice a los actores cómo
interpretar el guion y esas pequeñas cosas sin importancia. Y lo hace sentado en su silla de director. No le veo yo el mérito al señor director de primera, acelera, acelera (me he equivocao de canción)
And the winner
is
19 horas después de que el presentador haya empezado a
hacer bromitas, hayan cantado la banda sonora entera, se hayan agradecido y
dedicado todos los premios, llega el momento de decidir qué película es la más
mejor del año. Suelen ser películas de mucho llorar y cuanto más largas, más
posibilidades de ganar. Un suponer, Torrente no es de las favoritas a ganar un
óscar, ni un Goya, ni ná, pero a él no le importa, mientras no le cobres…
Bueno, pues nada, hasta dentro de unos días, que empiezan
los Oscars… y otra vez a ver quién es la mejor actriz original maquillada en un
vestuario mientras ve una película.
Si, Javier, pero como somos animales de costumbres, seguro que nos sentamos a ver los Oscar (¿se dice los Oscar o los Oscars? ¡maldición, no tengo a mano a mi amiguete el corrector!) aunque, como dice mi marido, al menos "con unas almendritas y uno bien cargadito...". Ya nos contarás... Besotes, Isabel
A veces, cuando me pongo a pensar sobre qué escribir en el blog, se me ocurren muchas cosas. Luego me doy cuenta de que alguien ya ha escrito sobre ello, y el cabrón o cabrona lo ha hecho mejor. Otras veces tengo una idea y cuando llevo un buen rato escribiendo, me digo “pero si de esto ya he hecho un post”. Y otras veces, directamente no pienso. Esta vez voy a escribir sobre cosas que ya se han escrito. Pero vamos a hacerlo de otra manera. Y os explico por qué. Pues “resultadeque” estaba leyendo una crítica de una película y no terminé de entender si me estaban recomendando verla, si era muy mala, o me comprara un Opel Corsa. No comprendí nada. Yo creo que los críticos de cine, como escriben a oscuras en la sala de cine, pues luego no entienden lo que han puesto y tienen que inventar, y de ahí lo de “la levedad inescrutable del personaje tiene connotaciones que nos recuerdan el sufrimiento crónico de la sociedad en un ambiente que recela de todo…” Y ahí estás tú l
Esta semana no me voy a meter con las cosas religiosas, a pesar del título (y de que a veces te ponen las cosas a huevo). Aunque los que pintan algo en la iglesia (no me refiero a la señora que hizo el garabato en Borja), se metan en las cosas de los demás, no lo voy a hacer yo. No hagas a los demás que te hagan como yo quiero al prójimo… (Creo que es algo parecido, pero es que ese día me cambié a Ética y me perdí la clase de “Reli”). Esta semana os quería hablar sobre los nombres. Pero no el nombre del padre o del hijo (de verdad que hay nombres de hijos que son para matar al padre y para que le dé un ataque al Espíritu Santo. No tenéis más que pensar en algún Kevin Costner de Jesús, “Yosuas” y Samantas). Hablaremos de los nombres comunes. Hay padres hijos de… Porque vamos a ver ¿Quién pone el nombre de las cosas? A los animales, a las flores, a las ciudades… ¿Dónde está el responsable? ¿Con quién hay que hablar para que se ponga orden? ¿Y qué es este sindiós de
¿Habéis recibido alguna vez un mensaje de WhatsApp de alguien que no conocéis? ¿Nunca? Un chico me había conocido en una discoteca y quería volver a verme. Le había dicho que me llamaba Susan. Y ahí le tenías, buscando a Susan desesperadamente. Estuve a punto de llamarle y quedar. Pero resulta que nos habíamos visto en un garito de Houston. Claro, ahí teníamos un problema. Típico de Houston. El caso es que, como ya sabéis, yo no me llamo Susan y nunca he estado allí (eso no lo sabíais). Así que tuve que declinar la oferta. En otra ocasión me escribieron para comprarme un reloj. Que yo al mío le tengo mucho cariño, pero es que me ofrecían 10.000 francos suizos. Lástima que no tengo ningún Rolex a la venta. Otros me escriben para cambiarme de compañía. Con lo que me gusta a mí la compañía que tengo. Que no les cambio por nada del mundo. Buena gente, amigos de sus amigos y siempre están ahí. O aquí. Según el momento. Ya me entendéis. Pero esta semana, me pasó una cosa notable. He
Si, Javier, pero como somos animales de costumbres, seguro que nos sentamos a ver los Oscar (¿se dice los Oscar o los Oscars? ¡maldición, no tengo a mano a mi amiguete el corrector!) aunque, como dice mi marido, al menos "con unas almendritas y uno bien cargadito...".
ResponderEliminarYa nos contarás...
Besotes,
Isabel