Blog de Javier Merchán. Ríete tú de las fake news de Donald Trump. Me invento todos los contenidos, pero no espero que nadie se los crea.
Escribo sobre cosas importantes sin tomármelas en serio.
¿Habéis recibido alguna vez un mensaje de WhatsApp de alguien que no conocéis? ¿Nunca? Un chico me había conocido en una discoteca y quería volver a verme. Le había dicho que me llamaba Susan. Y ahí le tenías, buscando a Susan desesperadamente. Estuve a punto de llamarle y quedar. Pero resulta que nos habíamos visto en un garito de Houston. Claro, ahí teníamos un problema. Típico de Houston. El caso es que, como ya sabéis, yo no me llamo Susan y nunca he estado allí (eso no lo sabíais). Así que tuve que declinar la oferta. En otra ocasión me escribieron para comprarme un reloj. Que yo al mío le tengo mucho cariño, pero es que me ofrecían 10.000 francos suizos. Lástima que no tengo ningún Rolex a la venta. Otros me escriben para cambiarme de compañía. Con lo que me gusta a mí la compañía que tengo. Que no les cambio por nada del mundo. Buena gente, amigos de sus amigos y siempre están ahí. O aquí. Según el momento. Ya me entendéis. Pero esta semana, me pasó una cosa notable. He
Obtener enlace
Facebook
X
Pinterest
Correo electrónico
Otras aplicaciones
El resumen resumido de la Historia Mundial
Obtener enlace
Facebook
X
Pinterest
Correo electrónico
Otras aplicaciones
-
Estaba yo el otro día
(os prometo que no voy a contaros un monólogo de El Club de la Comedia) viendo
en la tele como el Príncipe Felipe se convertía en Rey. En un pispás, era
Felipe VI. Sin ponerle la corona, ni tener que sacar una espada de una piedra,
ni que le besara un sapo, ni nadie gritando El Rey ha muerto, Viva el Rey (es
raro, pero pasa). Y de pronto pensé en la gente que, en unos años, tenga que
aprenderse cosas como ésta para los exámenes de historia. Felipe VI, hijo de Juan
Carlos Primero y Doña Sofía Después. Casado con la Reina Letizia Ortiz de
Asturias y RTVE. Padre la Princesa Leonor (tiene nombre de detergente) y de la
Infanta Sofía. Tío de Froilán de Todos los Santos… Ríete tú de Juego de Tronos
y sus líos.
La de fechas, nombres, batallas, listas de reyes
(¿listas y reyes en la misma frase?) que había que estudiar. Cuantas cosas
pasaron antaño en el Mundo Mundial (¿la gente de antaño también diría antaño?).
Y no se conformaban con preguntarte lo que había pasado en tu pueblo y
alrededores. Había que estudiar cosas que pasaron muy lejos (hasta en sitios
que no existen como el Congo y Sebastopol… ¿o sí?)
¿Y si nos hicieran un
examen de historia ahora? De algunas cosas me acuerdo, pero de otras… Vamos a
repasar un poco a ver. Pero sin hacer trampas ni mirar en “la interné”, ni la
enciclopedia, sin Wikipedia, ni logopedia, ni nada. Sin chuletas ni nada. Con ustedes los 14 momentazos de la historia.
Nos ponemos de pie
Según quien te
explique la historia del hombre (y de la mujer… Que también tuvo algo que ver),
se puede dividir entre los Cavernícolas y Adán y Eva. En mi cole nos explicaron
la historia desde los que vivieron en las cavernas. Lo de Adán y Eva lo dimos
en religión, pero veo lagunas en la explicación. También hay puntos débiles en
lo del Big Ben… No tengo muy claro que la tierra se creara con la explosión de
un reloj, por muy grande que sea, y aunque esté en Londres.
Pero sigamos con el
repaso. Hace la tira de años, antes de que naciera Marujita Díaz y la Duquesa
de Alba, había unos tíos con más pelo que la Pantoja y nombres muy feos. Homo Sapiens,
Neandertales, Cromañones, Atapuerquenses, Paquirrín… Con lo bonito que es José Alfredo
o María Antonia. Y a todos les daba por lo mismo. Que si a pintar las paredes (y
mira que dibujaban mal los caballos, los búfalos y los “mamuses”) y a fabricar
hachas y cuchillos muy rudimentarios. ¿Es que no había chinos para comprar
todas estas cosas? No me lo creo. Tenía que haber. Si hay en todas partes. ¡Que
poco evolucionados!
Éufrates y Tres Tristes Tigris
Una vez que
evolucionaron los de las cavernas y pusieron chinos para que compraran los
aperos de labranza (que bonita expresión), te tocaba estudiar a un montón de
gente que vivía por la zona de Babilonia (como los yogures) y sus alrededores. Sumerios,
fenicios, cartagineses y demás gente en barco. Que eran muy espabilaos y
vendían de todo, pero había que regatear.
Los
griegos
Llevaban casco, y
túnicas, y les gustaba la filosofía. Y tenían palabras que seguimos utilizando
como tele y termo (sí, a mí también me extraña que ya tuvieran televisión y
termo. Por eso nos tocaba estudiar Grecia, porque eran avispaos como ellos solos). Y ponían nombres muy deportivos a las
ciudades, como Esparta (que más tarde se
trasladó a Moscú, y a Praga), Olimpia, Maratón y 100 Metros Lisos (que no
triunfó y lo cambiaron por otro que ahora no recuerdo). También se montaban
jaleos de aúpa. En Troya, sin ir más lejos, hizo historia uno de los líos… Algo
tenía que ver un caballo de madera.
Romanos
En todo examen de
historia que se precie entraban siempre los romanos. Sabemos muchas cosas sobre
ellos, pero nunca nos contaron el misterio del buen tiempo en aquella época. No
se explica lo de las sandalias, faldas cortas y túnicas. No me creo yo que en
Roma en diciembre puedas ir por la calle de esa guisa (que no digo que no se
pueda, pero que hará frío). Y les gustaba el pan y el circo. Y los acueductos,
y las orgías, y comer uvas tumbados en los sillones esos que tienen los
psicoanalistas, y los cascos con un cepillo en lo alto…
Los egipcios
Unos señores y señoras que andaban de medio lado,
y les enterraban en un Toblerone gigante. Bueno en realidad en un trozo de
toblerone, y solo a algunos. A los faraones (como Lola Flores pero sin hablar
español…. Pensándolo bien a Lola Flores a veces no se la entendía
tampoco). Y les ponían vendas, aunque
no les doliera. A los muertos. Y de ahí salieron los muertos vivientes.
Godos
Como su propio nombre
indica, vivían en… sí hombre… en… Bueno, vivían. Y eran una jartá de reyes con
nombres de señor de pueblo que no tenían como residencia el Palacio de la
Zarzuela, pero están cerca del Palacio Real, ni tenían yernos que jugaban al
balonmano, ni se casaban con las presentadoras de televisión.
Este señor italiano
es el inventor de los fideos y de los macarrones con tomate (recordad que hablo
de memoria y ya estoy muy mayor). El caso es que también viajaba mucho y se
hizo colega de los chinos y abrió restaurantes italianos con Gengis Khan (el
tatarabuelo del portero alemán). Y también escribió sobre sus viajes, como Gulliver,
pero desde otros sitios.
Los
árabes
Qué les gustaba pasar
calor a los tíos. No van casi nunca donde hace frío. Por eso no subieron más
arriba de Asturias y porquePelayo (como
los seguros) no les dejó pasar porque tiraba piedras desde lo alto y tenía muy
mal carácter. Eso sí, hacían unas fuentes muy bonitas con sus chorros y todo, y
las matemáticas con sus números, y el álgebra, y todo lo que empiece por al,
como almohada, almorzar, y alabin alaban ala bin bon ban que servía
para animar en el deporte.
La Edad Media.
Es donde se pasaba
todo el mundo atacándose unos a otros y viviendo en castillos y en sitios en
los que se lavaban poco y había mucha peste (no sólo de mal olor). Y hablaban
un poco raro y todo rimaba, como en un rap pero sin poner caras de malo, y tenían
mazmorras, almenas, ballestas, trovadores y juglares y un montón de palabras
que me gustan mucho.
El Descubrimiento de América
Como casi todos los
descubrimientos fue de casualidad. Colón que se plantó delante de los Reyes
Católicos y les enseñó un huevo para convencerles de que le patrocinaran un
viaje a las Indias. Pues va el tío y descubre América, así, como el que no
quiere la cosa, con la ayuda de los hermanos Pinzones, que eran unos pájaros. Y
como se llamaba Colón, los colonizó… Menos mal que no se llamaba Sodom. Aunque
algo de eso también hubo durante la época.
El
Renacimiento
La gente no hacía
otra cosa que pintar y hacer esculturas. Mucho tiempo libre, me parece a mí que
tenían. Menos mal que luego guardaron muchas cosas en los museos. Y todos vivían en Italia, en el quatrocento y
cinquecento (que era un siglo muy pequeño de cuatro plazas pero muy cuco). Y
ahí estaba Leonardo, y Miguel Angel, y Rafael y otra de las tortugas Ninja que
no me acuerdo cómo se llamaba.
Revolución
Francesa y la Ilustración
En esa época los
señores llevaban unas pelucas horribles (parecían primos de la Duquesa de Alba,
no os digo más) y tenían unos pantalones piratas ideales de la muerte y las
señoras vestidos con andamios y no se ponían morenos. Pero se cabrearon los que
se habían tomado una Bastilla (¿sería una bastilla para la tos? Perdón L. Es que me han hackeado el blog y el
chiste no es mío).
La independencia de USA
Pues que los
americanos de los Estados Unidos de América dijeron que no querían tener al
Príncipe Carlos de Inglaterra (o era otro rey), y que hasta aquí hemos llegao.
Y se hicieron independientes. Luego se pegaron con los pieles rojas que eran
los buenos, pero ellos decían que eran malos, y se comieron sus búfalos o
bisontes o lo que quiera que se llamen los toros de allí). Y luego vino Bufalo
Bill y las pelis de vaqueros, y John Wayne que tuvo que poner orden en todo ese
caos de señores con sombrero de “caoboi”.
La
Revolución Rusa y vuelta a empezar
Los rusos que con el
frío que pasaban, se calentaron y querían echar al zar y a la Zarina (la que
cantaba lo del baúl de los recuerdos) y Rasputín. Y los bolcheviques, y
Mencheviques, y Alambiques (todos nombres muy rusos), y llegaron los comunistas
y así hasta Fidel Castro y el coleta de Podemos.
Rasputín. Todo un adelantado a su tiempo. Un
hipster del copón
Y esto es todo lo que
me acuerdo, porque en el cole, siempre terminábamos aquí y no nos enseñaban
nada de la II Guerra Mundial, ni la Guerra Civil, ni Rajoy, ni el Mundial, ni
nada. Lo bueno es que de esta parte ya han hecho películas (muchas) y algo
habremos aprendido… O no.
¿Que no es fiel a la realidad? Ya, pero también hay historiadores (o eso dicen ellos) que hacen cosas peores y venden libros. Esto al menos, te lo dejo tirado de precio. (Pero hay que regatear).
Javi, es la historia Mundial más corta y graciosa que he leído en mi vida. Perdona que te diga: "Cuanto te has documentado?". Descansa hasta el próximo blog.
¡¡Ufff, Javier!! ¡¡Qué alegría recuperarte!! Mi ordenador ha estado gravemente enfermo desde hace casi un mes y entre la operación, la UCI y el posoperatorio, un sinvivir... Daños colaterales: dirección de email desaparecida en combate y nueva dirección (chuli, eso sí) a comunicar al personal amigo...
Prometo leerme todos los "cigarritos y a la cama" atrasados de inmediato.
A veces, cuando me pongo a pensar sobre qué escribir en el blog, se me ocurren muchas cosas. Luego me doy cuenta de que alguien ya ha escrito sobre ello, y el cabrón o cabrona lo ha hecho mejor. Otras veces tengo una idea y cuando llevo un buen rato escribiendo, me digo “pero si de esto ya he hecho un post”. Y otras veces, directamente no pienso. Esta vez voy a escribir sobre cosas que ya se han escrito. Pero vamos a hacerlo de otra manera. Y os explico por qué. Pues “resultadeque” estaba leyendo una crítica de una película y no terminé de entender si me estaban recomendando verla, si era muy mala, o me comprara un Opel Corsa. No comprendí nada. Yo creo que los críticos de cine, como escriben a oscuras en la sala de cine, pues luego no entienden lo que han puesto y tienen que inventar, y de ahí lo de “la levedad inescrutable del personaje tiene connotaciones que nos recuerdan el sufrimiento crónico de la sociedad en un ambiente que recela de todo…” Y ahí estás tú l
Esta semana no me voy a meter con las cosas religiosas, a pesar del título (y de que a veces te ponen las cosas a huevo). Aunque los que pintan algo en la iglesia (no me refiero a la señora que hizo el garabato en Borja), se metan en las cosas de los demás, no lo voy a hacer yo. No hagas a los demás que te hagan como yo quiero al prójimo… (Creo que es algo parecido, pero es que ese día me cambié a Ética y me perdí la clase de “Reli”). Esta semana os quería hablar sobre los nombres. Pero no el nombre del padre o del hijo (de verdad que hay nombres de hijos que son para matar al padre y para que le dé un ataque al Espíritu Santo. No tenéis más que pensar en algún Kevin Costner de Jesús, “Yosuas” y Samantas). Hablaremos de los nombres comunes. Hay padres hijos de… Porque vamos a ver ¿Quién pone el nombre de las cosas? A los animales, a las flores, a las ciudades… ¿Dónde está el responsable? ¿Con quién hay que hablar para que se ponga orden? ¿Y qué es este sindiós de
¿Habéis recibido alguna vez un mensaje de WhatsApp de alguien que no conocéis? ¿Nunca? Un chico me había conocido en una discoteca y quería volver a verme. Le había dicho que me llamaba Susan. Y ahí le tenías, buscando a Susan desesperadamente. Estuve a punto de llamarle y quedar. Pero resulta que nos habíamos visto en un garito de Houston. Claro, ahí teníamos un problema. Típico de Houston. El caso es que, como ya sabéis, yo no me llamo Susan y nunca he estado allí (eso no lo sabíais). Así que tuve que declinar la oferta. En otra ocasión me escribieron para comprarme un reloj. Que yo al mío le tengo mucho cariño, pero es que me ofrecían 10.000 francos suizos. Lástima que no tengo ningún Rolex a la venta. Otros me escriben para cambiarme de compañía. Con lo que me gusta a mí la compañía que tengo. Que no les cambio por nada del mundo. Buena gente, amigos de sus amigos y siempre están ahí. O aquí. Según el momento. Ya me entendéis. Pero esta semana, me pasó una cosa notable. He
Javi, es la historia Mundial más corta y graciosa que he leído en mi vida. Perdona que te diga: "Cuanto te has documentado?". Descansa hasta el próximo blog.
ResponderEliminarTodo es fruto de la imaginación ;)
EliminarJaja. Genial!
ResponderEliminar¡¡Ufff, Javier!! ¡¡Qué alegría recuperarte!! Mi ordenador ha estado gravemente enfermo desde hace casi un mes y entre la operación, la UCI y el posoperatorio, un sinvivir... Daños colaterales: dirección de email desaparecida en combate y nueva dirección (chuli, eso sí) a comunicar al personal amigo...
ResponderEliminarPrometo leerme todos los "cigarritos y a la cama" atrasados de inmediato.
Mientras, besotes.
Isabel
Qué alegría saber que estás bien.
EliminarMuchos besos!!